Lo que necesitas saber:
Comprar un accesorio de FineWoven no es nada barato. Las fundas rondan los 59 dólares; los soportes para AirTag cuestan 35 dólares y las polémicas correas 99 dólares.
A días de la presentación del iPhone 15 en Cupertino. Apple ya se enfrenta a miles de críticas enfocadas en el material de sus accesorios: El FineWoven.
Aunque el innovador material promete cuidar el medioambiente al mismo tiempo que se ve cool. Lo cierto es que quienes han comprado productos de FineWoven se han quejado de la poca durabilidad y del acabado de las correas y fundas.
¿Qué es el FineWoven?
Hace poquito te platicamos del compromiso de Apple con el medioambiente y de sus productos Cabron Neutral que buscan reducir el impacto de CO2 rumbo a 2030.
En este sentido, los primeros productos Apple Carbon Neutral de toda la historia pertenecen a la nueva generación de Apple Watch y Apple Watch Ultra, fabricados con materiales reciclados y energías renovables.
Por si fuera poco, los empaques del nuevo Apple Watch están fabricados a base de fibra, lo que elimina cualquier rastro de plástico en la basura que puedan generar las cajas.
Los nuevos accesorios de Apple también fueron fabricados bajo el criterio del Apple Carbon Neutral y de esta forma fue como la compañía eliminó el uso de pieles para incorporar el polémico: FineWoven. Un material similar a la gamusa que ofrece resistencia y elegancia con un 70 por ciento de componentes reciclados.
¿Entonces cuál fue la bronca?
De acuerdo con distintos reportes en redes sociales. La decepción llegó cuando las y los usuarios sacaron del empaque sus accesorios —bastante caros, por cierto— y notaron que aunque el FineWoven luce muy bonito, acumula mucha pelusa y es bastante vulnerable a los arañazos.
Esta situación generó dudas sobre la duración que podría tener uno de estos accesorios tras el uso diario que le damos a nuestros dispositivos.
Y es que debes saber que comprar un accesorio de FineWoven no es nada barato. Las fundas rondan los 59 dólares; los soportes para AirTag cuestan 35 dólares y las polémicas correas 99 dólares.
¿Valdrá la pena gastar tanto para estos accesorios?