Lo que necesitas saber:
El mayor escándalo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) involucra dinero, abuso sexual de decenas de mujeres y trabajo forzado para que merecieran ser indemnizadas.
La Dra. Gaya Gamhewage, directora de Prevención y Respuesta a la Conducta Sexual Inapropiada de la OMS, viajó este año al Congo para salvar la poca reputación que le queda a esta dependencia de la Organización de las Naciones Unidas —ONU—.
¿Qué pasó en el Congo?
De acuerdo con AP News, una Comisión Independiente de la OMS encontró que, al menos, 83 hombres —incluidos 21 empleados de la OMS— abusaron sexualmente de 104 mujeres. La víctima más joven tenía sólo 13 años.
Los abusos sexuales de los funcionarios de la OMS ocurrieron en las misiones de auxilio en el Congo, entre el 2018 y el 2019. Cuando un brote de ébola atacó a esta comunidad.
Hombres completamente lúcidos, “profesionales” y con cierta autoridad violentaron a mujeres vulneradas por el sistema. Pero esto va más allá de un abuso de poder. Si un organismo internacional de la talla de la OMS actuó así, ¿qué esperanza de justicia tendremos?
Para “compensar” abusos sexuales la OMS soltó dinero
Pero tampoco crean que se desvivió. La Dra. Gamhewage fue a dar la cara por un montón de hombres que no son su responsabilidad. En “recompensa” la OMS supuestamente pagó $250 dólares a cada una de estas mujeres.
En la República del Congo la gente más pobre sobrevive con menos de $2,15 dólares al día, reveló la OMS. Así que estas mujeres y sus familias subsistirán menos de cuatro meses con ese dinero.
Eso sí, para que las mujeres abusadas sexualmente por trabajadores de la OMS recibieran la “generosísima” indemnización, asistieron a cursos de alguna actividad que las enseñara a generar ingresos. Como repostería o sastrería.
Mientras, algunos funcionarios de la OMS que trabajan en el Congo, reciben hasta $480 dólares por un sólo día de abusar sexualmente de mujeres. A la Dra. Gamhewage sólo le dieron $231 dólares diarios en sus tres días de estancia.
Los gastos de funcionarios y directivos se comieron más de la mitad de los $1.5 millones de dólares que la OMS destinó al área de Prevención y Respuesta a la Conducta Sexual Inapropiada en el Congo del 2022 al 2023. Sólo el 35% del presupuesto fue para las víctimas y el 12% para actividades de prevención.
¿En qué va el caso?
A raíz de los abusos sexuales por parte de funcionarios de la OMS nacieron, al menos, 17 bebés. Productos de embarazos no deseados. ¿La OMS practicando sexo sin condón y no consensuado? ¡Quién los viera!
Ahora dan atención médica —obviamente gratuita— a estos pequeños. Otros, por ejemplo, ofrecieron un terreno y una mesada a las víctimas… pero sólo hasta que naciera el bebé. De ahí en adelante “bye-bye”.
“No hay nada que podamos hacer para compensarlas. Obviamente no hemos hecho lo suficiente”.
– Dra. Gaya Gamhewage en entrevista con AP
Muchas de las víctimas confesaron que la OMS todavía no les ha dado nada para reparar el daño. Algunas no han sido localizadas, según la OMS. Otra docena no aceptó este tipo de “disculpa”.
Lo que quieren es justicia y que los abusadores sexuales de la OMS no dañen a nadie más. Según AP, ningún alto directivo fue despedido, ni siquiera los que se enteraron de tremenda fechoría.
¿Qué pasará si el Congo atraviesa otra crisis de salud? Las escasas condiciones locales traerán de vuelta a los violadores de la OMS y otras instancias internacionales. Pero ni la mayor cantidad de dinero compensará los daños causados.
*Con información de AP.