Lo que necesitas saber:
Además de la velocidad que alcanzarán estos trenes, el impacto positivo al medio ambiente es uno de los mayores beneficios que veremos en unos años.
A finales de este año comenzará la construcción de dos vías súper veloces que unirán a Los Ángeles con Las Vegas así como a las ciudades texanas de Dallas y Houston.
Estos proyectos están a cargo de las empresas Brightline West y Amtrak, respectivamente y prometen reducir significativamente los tiempos para desplazarnos entre estos puntos.
Sin embargo, en medio de esta carrera ferroviaria en Estados Unidos a muchos nos gustaría saber cuál será el tren más veloz y por eso hoy vamos a analizar ambos megaproyectos para sacar conclusiones.
Brightline West y su tren de Los Ángeles a Las Vegas
A finales de 2023 arrancará la construcción de una súper vía de 218 millas que conectará la ciudad de Los Ángeles con Las Vegas en un tren que alcanzará una velocidad máxima de 186 millas por hora.
Esto se resume en un trayecto de apenas dos horas y 10 minutos —la mitad de lo que te haces si viajas en coche— y por si fuera poco, la estación de Los Ángeles estará conectada con el servicio regional Metrolink, lo que significa que una vez que llegues podrás moverte sin broncas por tooooda la ciudad.
¿Sabías que puedes viajar gratis por el Metro de Los Ángeles si eres estudiante?
Amtrak unirá las ciudades de Houston y Dallas
Del otro lado se encuentra Amtrak y su influencia nipona. La compañía estadounidense planea implementar la tecnología que hoy podemos ver en los trenes bala Shinkansen de Japón.
¿El resultado? Velocidades máximas de hasta 205 millas por hora y un viaje de 90 minutos de Houston a Dallas a bordo del tren más rápido jamás creado en Estados Unidos.
Lejos de la velocidad, estos proyectos ayudarán al medio ambiente
Aunque la velocidad de estos “monstruos” seguro nos hará levantar las cejas, la verdadera sorpresa —una bastante agradable— tiene qué ver con el cuidado del medio ambiente.
Verás, tan solo en el caso de la vía Houston-Dallas, el proyecto de Amtrak reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero en más de 100 mil toneladas anualmente y eliminará el tránsito de 12 mil 500 automóviles que cruzan diario la autopista I-45.
Por su parte, el proyecto de Brightline West se suma a las intenciones de Karen Bass de eliminar paulatinamente los autos que utilizan combustible hasta 2042, cuando se espera que todos los vehículos sean cero emisiones.
